No es ningún secreto que la música tiene la capacidad de unir a las personas. Ya sea en un concierto, una boda o simplemente en el coche de camino al trabajo, la música tiene una forma de unirnos y hacernos sentir conectados unos con otros. En ninguna parte es esto más evidente que cuando se observa la relación entre la música y las generaciones.
Durante siglos, la música se ha transmitido de una generación a otra, convirtiéndose a menudo en una parte importante de nuestra identidad. Piensa en las canciones que creciste escuchando. Lo más probable es que hayan sido influenciados por la música que escuchaban tus padres o abuelos. A su vez, es probable que la música que escuches ahora se transmita a tus hijos y nietos.
Este ciclo de transmisión de la música de una generación a la siguiente es una parte importante de nuestra cultura musical. Es la forma en que mantenemos viva nuestra historia musical y cómo nos aseguramos de que las generaciones futuras puedan disfrutar de la música que amamos.
Así que la próxima vez que escuches tus canciones favoritas, tómate un momento para pensar en las generaciones de personas que se han visto afectadas por la música que estás disfrutando. Es algo poderoso, y es algo que todos deberíamos apreciar.